Más de 50 mujeres han sido víctimas de la organización en el último mes. Los integrantes captaban a las chicas en Nigeria y, antes del viaje, las sometían a ritos de vudú para esclavizarlas. Ya en España, las obligaban a prostituirse en clubes de alterne de todo el país y a entregarles sus ganancias para cubrir una deuda de unos 37.000 euros. Las víctimas debían ingresar el dinero en cuentas bancarias. Si no, sufrían amenazas, palizas y agresiones sexuales, además de nuevos daños mediante vudú.Las investigaciones comenzaron en noviembre a raíz de la denuncia de dos víctimas. Así pudo determinarse que el centro de operaciones de las dos redes estaba en Valencia, en una tienda de productos africanos. Se acusa a los detenidos de agresión sexual y delitos relacionados con la prostitución.